Modificaciones en comercialización minorista tras el ordenamiento monetario

 

En las últimas semanas se ha estado evaluando el impacto en las personas del ordenamiento monetario desde el punto de vista de los precios, tributario y bancario. En el caso del comercio interior, el impacto es directo porque es donde se materializan los precios y las distribuciones. Las transformaciones en la comercialización minorista están asociadas, además, por la eliminación gradual de los subsidios excesivos y gratuidades indebidas.

 

 
El comercio interior tendrá precios únicos

 

El rumbo del comercio interior estuvo marcado con la aprobación de los lineamientos, en particular con el 147 que refería que se debía “continuar, en correspondencia con la situación económica del país y los ingresos de las personas, el proceso de eliminación gradual de gratuidades indebidas y subsidios excesivos, bajo el principio de subsidiar a las personas necesitadas y no a productos”.

 

Además el lineamiento 149 consideró “mantener la alimentación que se brinda en la esfera de los servicios sociales, dando prioridad a las instituciones de salud y centros educacionales que lo requieran. Perfeccionar las vías para proteger a la población vulnerable o de riesgo en la alimentación”.

 

Como parte del ordenamiento monetario se derogaron 30 resoluciones de precios centralizados del Mincin, así como otras 559 normas por los dos grupos mayoristas y minoristas pertenecientes a ese organismo.

 

La Gaceta Oficial No.74/20 recoge 13 normas jurídicas vinculadas con el sistema de comercio, 11 de ellas relacionadas con los precios y tarifas de programas atendidos por el comercio, tanto de la canasta familiar normada y las dietas médicas, así como de otros programas priorizados y del funcionamiento del Sistema de Atención a la Familia, merienda escolar y red de gastronomía popular.

 

Igualmente se definen las tarifas y precios minoristas de los servicios personales y técnicos, de los materiales para la construcción y de los insumos agrícolas y productos alimenticios y no alimenticios, de venta liberada.

 


Diferencias entre la canasta familiar normada y la canasta básica de bienes y servicios

 

 

Sobre las diferencias entre la canasta familiar normada y la canasta básica de bienes y servicios de referencia, se explicó que esta última fue el punto de partida como concepto para incorporar la adquisición de bienes y servicios imprescindibles para las personas.

 

Dentro de esa canasta de bienes y servicios de referencia, continuó, está la canasta familiar normada, que sigue integrada por 19 productos alimenticios, cuatro no alimenticios y que en el orden del costo tiene una transformación, pero no es exactamente el total de los 800 pesos en alimentos.

 

En la actualidad, informó la ministra, la canasta familiar normada de los productos alimenticios tiene un costo en el entorno de los 18 pesos y su valor futuro será 180 pesos. Cuando a eso se añade la adquisición de combustibles, productos de aseo y otros productos imprescindibles, alcanza un costo total de 1 528 pesos.

 

En el caso de los alimentos, además de los contemplados en la canasta familiar normada, hay una estructura que incluye el consumo de los alimentos fuera del hogar, que puede ser en la red de gastronomía popular, en los comedores obreros, en los puntos de venta de productos agropecuarios, entre otros establecimientos.

 

 

Se subraya que no se incorporarán nuevos productos a la canasta familiar normada, y se reitera que la libreta de abastecimiento se mantiene con los 19 productos alimenticios y los cuatro no alimenticios. A la par, la novedosa canasta incluye servicios básicos, la transportación urbana, los servicios de telefonía residencial, entre otros.

 

Sobre la canasta normada, se notifica que cambia su precio, mantiene el respaldo en la libreta de abastecimiento y su vinculación con la bodega, según el dato emitido por el registro de consumidores. Se detalló que aún cuando cambian los precios, porque la venta de los productos es sin subsidios, tanto normados como regulados, el consumidor mantiene los plazos y derechos durante el periodo de vencimiento del producto.

 

Se ha tratado de homologar una tablilla de precios, aún cuando está publicada en Gaceta, que permitirá al consumidor visualizar en la bodega (hay más de 12 000 en el país) los nuevo precios de los productos.

 

Esta tablilla, que incluirá los productos de la bodega, así como aquellos que se ofertan en la carnicería, estará en todas las unidades el día que se inicie la venta de la canasta familiar normada.

 

En la canasta familiar normada los productos destinados a los niños tuvieron un tratamiento diferenciado. Por ejemplo, la compota, la leche, la carne, el picadillo y el pollo se mantienen con el precio actual. Esto beneficia a más de un millón 55 mil niños en todo el país.

 

 

 

 

 

 

 

 

Productos que se mantienen subsidiados

 

Las dietas médicas (hoy se contabilizan más de un millón 335 mil) también mantienen el subsidio para la carne y la leche. Se mantiene el subsidio a las dietas para las embarazadas (61 328) y para niños con determinados padecimientos.

 

Desde hace varios años en Cuba se atienden diferenciadamente niños con déficit nutricional hasta los 15 años. Hay censados 17 mil niños, quienes reciben un módulo gratuito. Eso se mantiene también, no se retira, incluso se incrementan los productos. Se aclaró que los productos correspondientes al consumo de diciembre, cuyo ciclo de venta concluye en enero, mantienen los precios con subsidio.

 

 

 

 

Después del día 23 se comenzará a vender una libra adicional de arroz con los nuevos precios, en tanto la canasta familiar normada correspondiente a enero, arrancará su comercialización el 30 de diciembre, como habitualmente se realiza en esta etapa del año, a precios sin subsidios.

 

 

Los productos que se venden por ciclo, o sea, el pollo, los embutidos, el picadillo, huevo, pastas alimenticias, y que correspondan a la canasta básica de diciembre, mantienen el mismo precio, puntualizó y anunció que a partir del 1ro de enero sí tendrán los nuevos precios.

 

 

Sobre los nuevos precios del arroz, se subrayó la necesidad de seguir apostando a la producción nacional, sobre todo en las provincias, y que a mayor calidad, corresponderá un mayor precio. Hay un grupo de servicios o productos como la canastilla y el uniforme escolar, que por su impacto en la población también se mantienen con subsidios.

 

La canastilla también se mantiene de manera subsidiada, la embarazada tiene derecho a la compra a partir de las 26 semanas, y también continuó la venta con subsidios del calzado profiláctico- ortopédico, que se comercializa a partir de recetas médicas.

 

En estos productos seguirá su sistema de venta y el control, se especificó y abundó que se modifican los precios actuales y se mantienen temas de venta y control de los productos destinados a pacientes incontinentes y postrados, para lo cual se emiten certificaciones de control del Ministerio de Salud Pública. Los productos para este programa, que contempla alrededor de 112 000 pacientes, se entregan en dos ciclos de distribución, dos veces al año.

 

 

¿Qué ocurre con los productos liberados?

 

Hay otros productos alimenticios que se venden de forma liberada y que mantienen su precio: el pollo, aun cuando su precio ha fluctuado en el mercado internacional; la salchicha, los refrescos, los siropes, las galletas de sal, mayonesa, pastas alimenticias y aderezo.

 

Entre los productos liberados cuyos precios se modifican están los rones de la industria nacional, las cervezas que produce la empresa mixta Bucanero, lácteos, conservas de frutas y vegetales.

 

Por otro lado, en el caso de los materiales de la construcción, el acero, las tejas de fibrocemento, la carpintería metálica, igualmente mantienen sus precios y “esto es una garantía para las personas que hoy tienen un subsidio y que están construyendo por esfuerzo propio”.

 

Asimismo ocurre con los precios de los productos de aseo e higiene. En el caso del jabón, aclaró, no es un producto de la canasta familiar normada. “Las condiciones de este año y las circunstancias del país, nos aconsejan llevarlo a un producto controlado, cuando las condiciones lo permitan volverá a la red liberada con sus precios actuales”.

 

Modifican sus precios los productos no alimenticios, como los insumos agrícolas que son de naturaleza importada, y cuyos precios bajarán en la medida de las posibilidades. “Se incrementa la ropa reciclada y los muebles y confecciones que se venden hoy en la red de comercio de forma liberada”.

 

 

A partir de enero se reestructura la red de tiendas

 

Sobre las tiendas que vendían en CUC y que comenzarán a vender en CUP a partir de enero, la ministra comentó que oportunamente se orientó ir incorporando en un grupo de establecimientos de ambas cadenas la venta en pesos, después se podía comprar en pesos y el vuelto se recibía en CUC, y luego se añadió la posibilidad de realizar las dos operaciones en CUP.

 

Lo anterior permitirá que el día cero, 1 049 establecimientos de ambas cadenas abran sus puertas para ofertar a la población productos en CUC. Posteriormente y de forma escalonada, el 5 de enero se sumarán los últimos 264 establecimientos que se incorporarán a la venta en CUC.

 

 

En paralelo a esto, a partir de las disponibilidades de productos, las cadenas de tiendas del 21 al 29 de diciembre extenderán el horario de servicio hasta las 9 de la noche; el día 30 trabajarán hasta las 6 de la tarde, mientras el 31 solo abrirán las unidades en CUC con el cobro en efectivo y el 1ro de enero aquellas que venden en MLC.

 

 

Otros servicios del comercio interior

 

Sobre el Sistema de Atención a la Familia, acotó que se trata del servicio de alimentación destinado a casos sociales, adultos mayores, personas con discapacidades o carentes de ingresos o familiares.

 

En este sistema hoy funcionan 1 445 unidades, se atienden 77 661 beneficiados, de ellos 36 298 son jubilados. Por otro lado hay 12 773 personas cuyo gasto es asumido por la asistencia social.

 

La ministra detalló que se mantiene un menú balanceado, aunque hay que seguir insistiendo en su calidad y en que tenga elaboraciones de productos blandos y el balance nutricional en el entorno de las 1 600 kilocalorías.

 

Se elimina el subsidio del sistema de atención, el cual no era otorgado exactamente por el Presupuesto del Estado. “Hoy el censado paga un peso y la empresa de gastronomía asume la diferencia de precio, porque también es un servicio que se creó para que la unidad tenga otras ofertas y funcione como restaurantes entre los horarios de almuerzo y comida”.

 

Los beneficiarios, sin solvencia económica, se evalúan por la asistencia social, así como aquellas beneficiadas por el sistema de atención a la familia, siguen recibiendo la canasta familiar normada. “Ellas tienen además una alimentación adicional cuando llegan al hogar”.

 

En cuanto a la merienda escolar, programa iniciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro en el 2006, seguirá gratuito para los estudiantes (en el actual curso se benefician 7 000) y en el caso de los profesores que quieran optar por esta merienda, tendrán que pagar ese servicio, que también fue parte del cálculo que se incorporó en la canasta básica.

 

 

Se pone a decisión de los Consejos de la Administración Municipal la aprobación de los precios máximos de las ofertas, los cuales no pueden crecer más de tres veces con relación a julio de 2019.

 

 

Consideraciones sobre el nuevo escenario

 

Otro tema es el relativo a la subida de precio del huevo. Donde quiera que haya un componente importado la devaluación encarece. Y el huevo es de producción nacional, pero la alimentación de los animales tiene una participación grandísima de producto importado en término de maíz, harina de soya y otros minerales. Si subiese la producción de maíz nacional y fuese más barato que el importado entonces también se pudiera reducir los costos de la producción de huevos, que en Cuba es muy eficiente. El problema son los componentes importados que tienen esos costos

 

En el tema del arroz, se avanzó en a poner precios iguales. Estaba una libra de arroz a 25 centavos, otra a 90 y otra a 4 pesos. Se visitaron bodegas que cuando se preguntaba por qué había varios sacos de arroz a la vez, me decían que uno era el de 25 centavos, otro el de 90 y así. Lo que debe diferenciar el precio minorista es la calidad del producto.

 

En el caso del pan, se daba uno de 80 gramos de lunes a domingo a cinco centavos, ahora valdrá un peso. Hay que decir que aunque la harina no es importada, el trigo sí lo es. Y usted lleva a un molino de trigo 100 toneladas del cereal y sacas 74 tonelada de harina. Y en una tonelada de pan el 86% es de harina, un componente que en términos de materia prima es importante.

 

 

Fuente: Cubadebate

 

 

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